El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es comúnmente asociado con niños, pero puede persistir en la adultez. Hoy te voy a explicar las causas más habituales de por qué aparece el TDAH en adultos, desde diferentes enfoques: genética, ambiente y desarrollo del individuo.
En otro artículo expliqué cuáles son las causas del TDAH más habituales, así como los síntomas que presenta, tanto en adultos como en niños. Pero hoy quiero profundizar específicamente en las causas de la aparición de estos síntomas a la edad adulta.
Entonces, ¿por qué aparece el TDAH en adultos?
El TDAH en adultos tiene diversas causas, que pueden incluir factores genéticos, ambientales y del desarrollo. Como se suele decir, cada persona es un mundo. Pero sí es posible establecer una serie de causas generales que, si bien no explican la aparición del TDAH en adultos en el 100% de los casos, sí explican una mayor predisposición a que se manifiesten sus síntomas a cualquier edad.
Factores genéticos de la aparición del TDAH
La genética juega un papel crucial en la aparición del TDAH. Estudios han demostrado que este trastorno puede ser hereditario, lo que significa que se puede transmitir de padres a hijos. Aquí algunos puntos clave sobre la influencia genética en el TDAH:
- Herencia Familiar: Si un pariente cercano, como un padre o un hermano, tiene TDAH, hay una mayor probabilidad de que otro miembro de la familia también lo desarrolle.
Es bastante frecuente que, padres y madres de jóvenes a los que diagnosticamos de TDAH, en consulta tengan un momento de “revelación” y nos comenten que ellos se sienten muy identificados con los síntomas del TDAH que estamos describiendo en sus hijos.
Lo cierto es que es así con relativa frecuencia, porque el TDAH tiene una herencia de hasa el 70% entre familiares.
- Estudios de Gemelos: Las investigaciones con gemelos han mostrado que si uno de los gemelos idénticos tiene TDAH, el otro tiene una probabilidad muy alta de presentarlo también, lo que supone una evidencia más del componente genético del TDAH.
- Genes Específicos: Algunos estudios han identificado genes específicos que pueden estar relacionados con el TDAH. Estos genes están involucrados en la regulación de neurotransmisores como la dopamina y la norepinefrina, que es crucial para el control de la atención y el comportamiento.
Factores Ambientales
Diversos factores ambientales pueden aumentar el riesgo de desarrollar TDAH. Estos factores pueden influir desde el periodo prenatal hasta la infancia temprana:
- Exposición a Toxinas: La exposición a ciertas toxinas ambientales, como el plomo, ha sido vinculada al desarrollo del TDAH. El plomo puede encontrarse en pinturas antiguas y algunas cañerías, y su exposición puede afectar el desarrollo neurológico de los niños.
- Consumo de Sustancias durante el Embarazo: El consumo de tabaco, alcohol o drogas por parte de la madre durante el embarazo se ha asociado con un mayor riesgo de TDAH en sus hijos. Estas sustancias pueden afectar el desarrollo fetal y causar problemas neurológicos que persisten en la adultez.
- Complicaciones Prenatales y Perinatales: Problemas durante el embarazo, el parto prematuro y el bajo peso al nacer también son factores de riesgo. Estos problemas pueden afectar el desarrollo del cerebro y contribuir al desarrollo del TDAH.
Problemas del Desarrollo
Las alteraciones en el desarrollo del sistema nervioso central durante etapas críticas también están relacionadas con el TDAH. Estas alteraciones pueden ocurrir debido a varios motivos:
- Desarrollo del Sistema Nervioso Central: Problemas en el desarrollo del sistema nervioso central en momentos clave pueden tener un impacto significativo en el funcionamiento cognitivo y el comportamiento. Estas alteraciones pueden contribuir a las características del TDAH. Concretamente, sabemos que las áreas del córtex frontal y de los ganglios basales (áreas relacionadas con la atención, la hiperactividad y la impulsividad) presentan diferencias entre las personas con TDAH y las que no lo padecen.
- Funciones Ejecutivas: El TDAH está relacionado con una disfunción en las llamadas «Funciones Ejecutivas». Estas funciones incluyen la capacidad de planificar, organizar, controlar los impulsos y mantener la atención. Las personas con TDAH pueden tener dificultades para utilizar estas funciones de manera efectiva, lo que puede explicar muchos de sus síntomas.
- Neurotransmisores: Los desequilibrios en los niveles de ciertos neurotransmisores, especialmente la dopamina y la norepinefrina, también están implicados en el TDAH. Estos neurotransmisores son esenciales para la regulación de la atención y el comportamiento.
Conclusión: la aparición del TDAH puede darse en cualquier etapa, niños y adultos
El TDAH en adultos es un trastorno complejo con raíces en la genética, el entorno y el desarrollo temprano. Hoy nos hemos preguntado por qué aparece el TDAH en adultos y hemos hecho una revisión general de las posibles causas.
Los síntomas pueden variar pero suelen incluir problemas de atención, hiperactividad e impulsividad, aunque típicamente la persona con TDAH suele presentar una mejoría de su hiperactividad a medida que se hace mayor, mientras que los problemas atencionales y de impulsividad persisten (¡si no se tratan!).
A menudo no diagnosticamos el TDAH hasta la edad adulta. Esto no es porque su debut sea entonces, si no porque la persona no había presentado problemas derivados de este hasta esa edad.
Por ejemplo, una persona con TDAH con buenas capacidades y recursos personales, puede que haya tenido una vida académica sin incidencias, haya optado por un trabajo donde al concentración no era algo estrictamente necesario, y no haya presentado nunca síntomas que hicieran sospechar de este trastorno. No obstante, si esa misma persona, presentara un ascenso en su trabajo y se encontrara ocupando un cargo con más responsabilidades de gestión, planificación, organización y que requiriese más concentración, quizás en ese momento sería donde ese TDAH saldría a la luz.
Afortunadamente, con un manejo adecuado del TDAH adulto, que puede incluir terapia, cambios en el estilo de vida, y a veces medicación específica, es posible llevar una vida plena y productiva. Si sospechas que podrías tener TDAH, es fundamental buscar ayuda profesional para un diagnóstico y tratamiento adecuados.