Ansiedad y estrés
Aunque se diga que cierto nivel de ansiedad o de estrés es normal e incluso puede ser beneficioso para mejorar nuestro rendimiento, lo cierto es que a veses llega a unos límites en los que se pasa verdaderamente mal, con síntomas que oprimen e incluso llegan a afectar a nuestro cuerpo a un nivel físico (cefaleas, mareos, adormecimiento de los miembros, opresión torácica, falta de aire…).
A veces incluso puede llegar a presentarse en crisis de pánico, extremadamente invalidantes para quien las sufre. En otras, la ansiedad es fruto de un trastorno obsesivo compulsivo (TOC), o se manifiesta de forma muy concreta, a través de fobias.
Encontrar un sitio donde abordar estos síntomas, analizándolos, dándoles nombre y un sentido nuevo, pueden ayudar a que estos se modifiquen hasta su disolución.